La agonía de la clase media-alta mexicana del Distrito Federal, por afrontar sus verdaderos sentimientos en medio de una tragedia natural, quedan expuestos a la ligera sin mucha gracia y con un deficiente argumento, en Todo Incluido, de Rodrigo Ortúzar Lynch, una coproducción de México y Chile, a punto de estrenarse con 250 copias en el vecino del sur (10 de julio).