Viva (2016): Cine de Drag Queens Cubanas con un Toque Irlandés

Cineasta europeo visita Cuba por primera vez y como ellos sí pueden viajar, se la pasa bomba. Como buen ciudadano del mundo, está abierto a toda expresión artística y va a un sinfín de eventos culturales. Nada de política, nada. Durante una noche calurosa después de unas copas en el malecón, sus nuevos amigos lo invitan a un show de drag queens o transformistas, el mejor de La Habana, le aseguran. Se enamora desde el primer momento con la atmósfera, la gran mayoría de asistentes son locales, así que tiene un sello de autenticidad. Cada uno de los números musicales, transmiten una emotividad que nunca había experimentado. “Es todo un arte”, dice.

Se la pasa tan bien que lo llevan a los camerinos para conocer a cada una de las estrellas de esta noche. Su español es bueno, así que se puede defender y comunicar decentemente, esas vacaciones en España fueron lo mejor que le ha pasado. Con el paso del tiempo, las conoce muy bien, por dentro y fuera del cabaret. Sabe que hay una historia increíble en cada una de ellas y que merecen ser contadas; la tenacidad, el valor y el buen sentido del humor ante las adversidades y la vida misma, lo hacen pensar en una película sobre ellas. 

Sin embargo, pronto se da cuenta que esas historias, no pueden sostener un filme de manera comercial y ya que no desea realizar un documental, necesita reconfigurar su relato; crear una trama convincente que el público se pueda identificar y de paso ofrecer redención a uno de los personajes, y que mejor si un villano. En pocas palabras se necesita una fórmula ganadora.

Jesús

Como se puede leer lo anterior es pura ironía y no tengo la menor idea de las intenciones, e inspiración de quienes desarrollaron Viva (2016, Magnolia Films), pero lo cierto es que el filme del director Paddy Breathnach se queda en eso, una fórmula que simplemente nunca despega. Así tenemos a Jesús (Héctor Medina), un chico cubano que corta el pelo y arregla las pelucas de un grupo de transformistas liderados por la Mamá, interpretado por José Luis García increíblemente. Vive solo ya que su madre falleció y su padre está preso por homicidio. Las ambiciones de Jesús van más allá de arreglar cabellos sintéticos, lo que él desea es subirse al escenario y ser parte del show. Asiste a una de las audiciones y no lo hace tan mal, y la programan para esa misma noche. Su nombre es Viva. 

El padre es un ex boxeador, quien es el gran actor cubano Jorge Perugorría y un tanto desaprovechado, obtiene su libertad. Una chismosa del edificio le informa que su hijo trabaja como transformista y el machismo caribeño sale a relucir. Una pelea en el cabaret entre los dos podría indicar que este es el conflicto familiar que tanto esperamos: padre ausente contra hijo homosexual que trabaja como drag queen. Al prohibirle esto, Jesus no encuentra otra opción que volver a vender su cuerpo ante los turistas de mayor edad. No obstante, la trama es trillada y predecible; los diálogos no avanzan la historia, y los personajes secundarios solo estorban a las transformistas, las verdaderas estrellas aquí. Breathnach pierde una gran oportunidad por no centrarse en ellas.   

Viva

Atinadamente se evitan los subtítulos en las canciones y logran su cometido. No importa el idioma, uno siente el terror del abandono y el engaño, así como el llamado al amor. En este cabaret las chicas no hacen piruetas, no hay cambios de ropa inesperados, solo estrellas que ofrecen el verdadero arte del transformismo. A pesar de las bellas escenas en La Habana y de tener un mensaje de aceptación, Viva nunca encuentra el verdadero ritmo cubano que tanta falta le hace a esta película irlandés. Buenas intenciones no necesariamente se traducen —en inglés o en español— en buen cine.

Contexto 2022

Como muchos recordarán, Viva estuvo entre las semifinalistas por la nominación a los premios Oscar como Mejor Filme Internacional en representación de Irlanda, sin lograr la nominación. Paddy Breathnach continúa dirigiendo series la televisión, en tanto que los tres actores cubanos: Perrugoría, Medina y García, siguen trabajando en tv y una que otra película. Y parece que el padre e hijo en Viva, tienen otro proyecto juntos en puerta.