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Cuando se estrenó en Estados Unidos, hace un rato, pudimos hablar con el cineasta sobre la preparación a la que fueron sometidos los actores para los sangrientos roles. En esa ocasión nos aseguró que hicieron diversos ejercicios de campo, entre esos, fueron a la morgue en la Ciudad de México. "Fuimos a ver autopsias, a rastros de animales para ver
como mataban a las reses y como las cargaban y destazaban para que se
familiarizaran con los instrumentos. Al final les pedí a los actores, la
última semana antes de filmar, que se aislaran del mundo, que
desconectaran su celular, se encerraran en sus casas, que no hablaran
por teléfono con absolutamente nadie más que conmigo. Este ejercicio de
aislamiento terminó cuando comenzó la filmación".
