Ante la ausencia y presencia del amor, dos ex-presidiarios con una amplia diferencia de edades y experiencia, deciden dar el golpe de sus vidas en Santiago de Chile.
¿Quién no desea robarle algo al dictador? El Baile de la Victoria es una historia chilena, con actores argentinos, de capital y dirección española. ¿El resultado?: irregular. Mucho de lo que leí, después de su presentación en San Sebastián, eran casi unánimes, es mala.
Han pasado varios meses después de eso, y ahora con la mente abierta puedo decir que existe algo de razón. No he leído el libro de Antonio Skármeta —y tampoco lo haré— pero al juzgar de la cinta no parecía del todo filmable, resulta poco interesante.
El argumento ofrece múltiples irregularidades y huecos, que no logran darle un ritmo coherente a esta historia de más dos horas. ¿Recién comenzó la democracia? ¿Son los finales de los 90? ¿Cuándo llegaron las computadoras a los diarios de Chile? Okay el filme tiene algo de realismo mágico, pero aún así, los problemas salen a flote.